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viernes, 24 de febrero de 2012

La habitación del pánico.




Viajábamos en avión cruzando Suiza.

Al atravesar  durante un tiempo la zona extensa de los Alpes hay ajetreo entre viajeros. Los del lado derecho visualizaban  algo extraño abajo. Tanto que provocó que parte de los viajeros del lado izquierdo fueran a visualizar lo que llamaba la atención.  A gran altura se veía salir  de una explanada rodeada de montañas copadas de nieve tres enormes aparatos de un color verde plateado. Digo grande porque cuando me acerqué a ver desde la ventanilla, se podía ver con nitidez tres aeronaves de enormes dimensiones.  Enseguida supe que no era  obra de humanos.  Ante tanto revuelo, el piloto a través de un micrófono llamó varias veces al orden y nos complació reduciendo la velocidad para que  todos los viajeros pudiéramos  verlo. 

La aeronave tenía dos frentes diferentes, dos extremos adaptados según un u otro tipo de barreras que romper. Tenían en un extremo un  medio-circulo o media luna y en el otro extremo había una especie de diseño de avión Concorde. Sus dimensiones me hicieron temblar porque podía sentir la naturaleza de esos seres, fuertes, inteligentes capaces de una construcción así. La nave más pequeña  superaba  30 veces el tamaño del avión más grande construido por el hombre. Las tres se encontraban como si hubieran salido del interior de las montañas.

Más tarde pienso que es posible que desde el aire pudieran sufrir un ataque. Siento ver el efecto del resultado como una gran explosión nuclear. Pienso que lo que ellos puedan hacer aquí no invade nuestro desarrollo. Nuestro organismo no es capaz de vivir y trabajar bajo estas temperaturas, incapaces de diseñar algo así, incapaces de tan alta tecnología. Pienso que pueden tener necesidad de algún elemento que no les resulte fácil conseguir en otros mundos y finalmente estén aquí solo para recoger algo necesario para su evolución.

Más tarde me veo presente en una guerra en la que estos seres son atacados por la élite militar de diferentes países. Veo cómo manejan artilugios de guerra y armamento de última tecnología. Me hayo presente, pero no soy visualizada por ninguno de los que  preparan el ataque. Por más que aviso, por más que digo,  no hay forma de salir de esta guerra, mis voces son ecos al vacío. El armamento de los seres (falsamente invasores) es potencialmente superior. Veo su físico de dos metros de altura y gran corpulencia y manejan sistemas de ataque fácilmente destructivas sin el uso de armas. Siento su capacidad de eliminar barreras y cualquier obstáculo. Para ellos somos seres primitivos.  En su pensamiento evolutivo no existe clemencia para nuestra raza. Siento que no atacan si no ven en riesgo su misión.

Me veo avisando de que su tecnología es terrible, que van a morir  todos, que hay que desistir, pero mi voz es nula. Los militares entran para atacar en un refugio o boquete de montaña. En la oquedad de piedra se halla una gran cueva de paredes lisas y color claro que contrastan en la gran oscuridad. Es una trampa, los militares han caído en la red. Creen estar seguros en su escondite e ignoran que se encuentran en un zulo. Sintiéndose seguros preparan sus artilugios para atacar al invasor “pero es nuestra raza, los humanos quien les invade y  ataca”.

Viendo  una guerra perdida y sin justificación me veo intentando salir del zulo. En las paredes de la cueva la piedra húmeda refleja una tenue lucecilla roja y me aferro a ella palpando su lomo frío y resbaladizo hasta que mis manos rozan el saliente del marco de una puerta metálica blanca  (como las que hay en  los largos túneles para salir ante el peligro cuyo membrete en rojo dice "auxilio”).

Entro en la habitación de blanco y siento verme como en la habitación del pánico, toda está bloqueada, no hay salida. La única puerta da a la cueva y es donde no deseo estar ni ver lo que pasa.  Allí permanezco  encerrada y pensando que va a pasar cuando la guerra termine, mueran todos y me vean bloqueada por el pánico. Pienso que también me destruirán a mí una vez hayan terminado con ellos y pienso que tampoco tendrán miramientos cuando me vean, que mi final será igual que el de ellos.

Encerrada, escapo de una guerra que no entiendo, no justifico y está perdida de antemano. Nosotros al conocer su existencia fuimos contra ellos como si hubieran allanado la tierra, como si la tierra fuera propiedad  de los humanos. Ellos, teniendo el poder de atacarnos de mil formas, no lo hicieron.

En la habitación del pánico culmina silencio. No se oyen balas ni gritos. Pasado un tiempo alguien abre la puerta y me pregunta que hago dentro y respondo que no participo en guerras perdidas, que por favor cierre y me deje estar dentro.

Intuyo al salir que todos han muerto. No visualizo a nadie, el armamento está intacto, no ha habido ataque cuerpo a cuerpo. No hay heridos, ni sangre. La emisión de un sonido dañó su cerebro provocando la muerte de todos, posteriormente un gas difuminó sus cuerpos.

martes, 7 de febrero de 2012

De otro mundo.


Me he visto sentada frente a un ser diferente a la raza humana pero de características físicas similares. Todo su cuerpo estaba cubierto como si llevara un traje de neopreno,  excepto el rostro. No tenía pelo y no sabría definir su sexo porque su rostro no mostraba características o rasgos que me orientaran, tampoco bajo su traje mostraba definición física que pudiera distinguir su sexualidad.


Le pregunté si estaba desnudo y me dijo que no, que llevaban una especie de segunda piel adaptada con las propiedades físicas de nuestras prendas y otras más. De recién nacidos se les baña en este ungüento que les sirve de aislante al medio externo, protege la temperatura al tener efectos térmicos, contiene nutrientes  minerales y vitaminas, aporta humedad, es antibacteriano, según edades integra componentes vacuna. Se ha de renovar cada determinado tiempo, es biodegradable no daña al medio y su pérdida sirve de alimento a otros seres.

No existen industrias que contaminan y toda la población lleva la misma envoltura. La única particularidad es el tipo de  envoltura que según edades es diferente adaptándose al crecimiento y necesidades.

Los trajes se renuevan en una especie de cabinas, entran, les cubren con una especie de gel en el que elimina el resto del traje deteriorado y se vuelven a cubrir de nuevo con el segundo gel, así varias veces en su vida.  Yo pregunto y ¿cómo eliminan? El traje es permeable, tiene unas aberturas ocultas que se abren al tener necesidad.

No portan nada encima. Su imagen corporal, el rostro y especialmente los ojos se gravan en cualquier estancia que vallan.  No llevan encima ropa, bolso, relojes, llaves. Hay cabinas que realizan virtualmente cualquier deseo experimental, sirven de ocio quedando registro guardado no solo su estancia, también queda registrada la emotividad experimentada, sensaciones, pensamientos y deseos. La persona es registrada por seguridad a modo escáner siempre vaya a donde vaya.


Los envases o envoltorios, todos, sean del tipo que sean tienen diferente diseños. Las capas físicas del mismo elemento varían para darles la rigidez o características precisas, pero están elaborados con los mismos compuestos químicos, de manera que cuando se recicla sólo se ha de reciclar un tipo de elemento para volver de nuevo a renovarlo, tiene además las características de biodegradable y al igual que su segunda piel no dañaría al medio ambiente.


La ingesta de alimentos es muy poca en relación a los humanos terrestres. Ingieren menos cantidad pero la absorción de nutrientes es muy alta, se excreta  por tanto menos y el metabolismo se haya reducido. La temperatura es más baja, a diferencia de nosotros, están adaptados al frío negativo  y no a las  cálidas temperaturas de nuestro planeta.

Utilizan los volcanes como incineradoras. Los residuos orgánicos se mezclan junto al resto de materias que no les son útiles y son trasportados a través de canales o redes a la combustión volcánica, evitando de este modo acumular deshechos, utilizan las mismas redes de calor volcánicas  para las necesidades de energía.


Habla que cuando uno se encuentra enfermo porque algún órgano está defectuoso o envejecido se ingresa en periodo de hibernación, máximo dos días, quizás horas según el grado o daño de lesión.   Mientras se hayan ingresados el metabolismo al estar reducido  necesita menos aporte de nutrientes, menos oxígeno por lo que  genera poco estrés oxidativo. Permanecen en la Unidad Basal Mínima (UBM) hasta la recuperación fisiológica. Los órganos se restituyen si se puede por microcirugía intra-corpórea  o estimulan mediante ingeniería genética el desarrollo del nuevo órgano dentro del cuerpo. Superan la edad de 1000 años.  


Lleva un especie de  colgante con un ser cristalizado o fosilizado para mi, repulsivo. Le pregunto  si es algún ser de su mundo, responde que es una  copia de sus orígenes. La genética es tan avanzada que pueden retro-activar  su evolución y ver las etapas antecesoras  en pantallas, como una televisión. Después el genetista en una especie de pequeña cámara virtual introduce  los genes y elabora una copia. Lleva  una imagen del principio genético de sus orígenes como si fuera un detalle de solapa.


Me habla, los seres humanos no pertenecen a quien los trae al mundo, pertenecen al planeta. Son las  instituciones del estado las encargadas de vigilar  la crianza y educación potenciando desde que nace su desarrollo psíquico y físico.   Todo conocimiento que no se practica o ejerce se extingue, por eso llevan siglos educando en función de su genética y potenciando las  dotes  innatas que demuestran en la infancia.

Los pilares básicos de su evolución son ciencia y el avance tecnológico. No se concibe el sufrimiento físico, irse del mundo con dolor físico ni permanecer en él con sufrimiento. 


Tengo gran interés en saber otras cosas y le espeto ¿conoces varias especies? Y  responde que hay tantas como la mente pueda imaginar. Calla y me pregunta ¿Cuántas clases de aves conoces? Respondo muchas, es imposible de cuantificar e incluso conocer con exactitud, calculo que debe haber miles, es una evolución muy extendida y variada. Dime entonces ¿Porqué creéis que estáis solos? 

La información que nos llega es parcial, enfocada, emitida  y elaborada por la percepción de personas especialistas. La mera información  siempre es parcial y entendida según evolución perceptual y educacional, pero a su vez también es una percepción personal por lo tanto la información la entendemos a su vez de manera parcial. La verdad de un todo nunca llega por ser amplia y compleja, requeriría de estudios complejos, tiempo y dinero.

También incurriríamos a parcializar los hechos pese a que se mostraran lo más cercanos a la realidad porque llevamos arrastrando en nuestra evolución la percepción de las cosas que vemos u oímos en función del estado físico y psicológico del momento. La verdad se escapa siempre, es la suma de percepciones parcializadas.  Nosotros nacimos sumergidos en unas guías educativas del cual heredamos e institucionalizan.  Por eso cuando alguien sale de la norma o dice ser sometido a alguna experiencia no frecuente y clasificada como fuera de lo normal, se anula y justifica con razones vinculadas al método científico aunque en realidad no sea clasificable.


Muchos humanos creen que no estamos solos, que posiblemente estemos cerca de alguna especie evolucionada y que es posible que la evolución de las especies de Darwin sea la norma en planetas que contengan similares características, planeta rocoso, agua líquida, atmosfera, etc., elementos indispensables para la vida tal y como la conocemos (debido a los avances, hoy se admite que la vida puede originarse en planetas cuyas características físicas son muy diferentes a la tierra)  por lo tanto, sí  creen posible que existan extraterrestres  inteligentes  pero nuestra educación está diseñada y dirigida para no creer en lo que no se ve y asumir como verdadero  y práctico una educación dogmatizada e institucionalizada.

Dime ¿sientes miedo? No más miedo que el que pudiera tener a humanos. Nos han educado con el miedo. Así que si alguna vez tuviera un encuentro y me generara miedo, mi percepción sería parcial porque ese miedo bloquearía la parte de realidad que yo visualizara o recordara.  Me interesaría ver otros mundos antes de partir, poder ver su evolución, que piensan de nosotros y preguntar lo que todo ser humano ¿porqué estamos aquí? 

Todo lo que uno posee en la tierra con el tiempo vuelve a la tierra. Los valores por los que luchamos para obtener estabilidad o seguridad carecen de sentido. El planeta tiene su vida propia, se destruye, se renueva y con él también el conocimiento. La especie humana ha sucumbido varias veces, al igual que su avance.  El verdadero valor se halla en la evolución, el conocimiento, el avance tecnológico. Garantizar su protección debe ser primordial y la tierra no es el lugar adecuado para protegerlos.


Conforme el hombre vaya adquiriendo mayor conocimiento  más se desprenderá de los artilugios banales en los que vive inmerso, será más generoso y se establecerá unanimidad, una única creencia moral tomando como única guía espiritual el bien común y el respeto. Entendiendo como el bien común y respeto no solo entre humanos sino también hacia las diferentes especies que lo habitan y el planeta que los sostiene.